112. Cuerpo u objetivos ¿En qué invertir?

Vivir de la Fotografía

¿En qué debes invertir antes? ¿Cuerpo u objetivos? Esta pregunta es muy habitual, ya que como normalmente no disponemos de todo el dinero del mundo... nos toca exprimir el presupuesto para sacarle el máximo rendimiento. Por lo que en este episodio queremos darte los motivos que te deben decantar por una opción u otra.

Y antes te recordamos los cursos que están publicándose esta semana en la academia. Por un lado tenemos 2 nuevos capítulos del curso de esquemas de iluminación con un solo flash y el viernes continúa el curso completo de Capture One Pro.

Motivos para invertir más en el cuerpo de cámara

• Si tus clientes demandan grandes ampliaciones en papel o te gusta hacer grandes re-encuadres necesitaras un cuerpo de cámara con muchos megapíxeles.
• Cuando necesitas mayor rango dinámico
• La velocidad de disparo porque haces deportes o no puedes perderte ni un solo milisegundo de la acción a fotografiar.
• Disparar con un ISO alto, ya que trabajas en condiciones de baja luminosidad y no puedes usar trípode.
• Protección ante la intemperie porque fotografías bajo la lluvia, temperaturas extremas, o trabajas bajo situaciones extremas varias.
• Estabilización en el cuerpo de cámara.

Motivos para intervir más en ópticas

• Cuando te es imposible conseguir un tipo de fotografía sin una óptica en concreto, como es el ejemplo de los objetivos macro.
• Calidad óptica y nitidez tu tipo de nicho fotográfico exige la máxima calidad óptica.
• Tardan más en perder valor o quedarse obsoletos a diferencia de los cuerpos de cámara.

Conclusión al debate entre cuerpo u objetivos

Hay mucho en lo que puedes invertir y no solo en lo referente a equipo fotográfico, como trípode, filtros, tarjetas, etc. También puedes invertir tu presupuesto en algo tan importante y necesario como el marketing para fotógrafos.

Pero hemos querido centrarnos en este debate, ya que es una pregunta muy recurrente. Y como has visto, no solo debes elegir una opción u otra con relación a la calidad resultante, sino en las necesidades de tu trabajo y de tus clientes.